La
Gracia de Navidad
El
25 de diciembre de 1886 se le concedió la gracia de sa
lir
de su infancia; "en una palabra
la gracia de mi completa conversión"(Historia
de un alma- Ms. A-Cap. V).
"-
Volvíamos de la misa de medianoche...Al llegar a los Buissonnets, comencé
a saborear la alegría de ir a la chimenea a recoger mis zapatos.Tan grande
había sido siempre el gozo que esta vieja costumbre nos había
causado durante la infancia, que Celina se complacía en seguir tratándome
como a un bebé, puesto que era la más pequeña de la familia...
Papá gozaba al ver mi alborozo, al escuchar mis gritos de júbilo
a medida que iba sacando las sorpresas de mis zapatos encantados, y la alegría
de mi querido rey aumentaba en gran manera mi propia felicidad.
Pero
Jesús, queriendo demostrarme que era ya hora de dejar de lado los defectos
de la infancia, me retiró también las inocentes alegrías
de la misma. Permitió que papá, fatigado de la misa de medianoche,
no viese con gusto mis zapatos colocados en la chimenea y pronunciase estas
palabras que me atravesaron el corazón: "¡En fin, afortunadamente
ya es el último año!..." Yo subía en aquel mismo momento
la escalera para dejar mi sombrero.
Celina,
conociendo mi sensibilidad y viendo brillar las lágrimas en mis ojos,
sintió también ganas de llorar, pues me amaba mucho y se hacía
cargo de mi pena: "¡Oh, Teresa, no bajes ahora a mirar los zapatos,
sufrirías demasiado!"¡ Pero Teresa, ya no era la misma, Jesús
había cambiado su corazón!.
Ahogando
mis lágrimas, bajé rápidamente la escalera, y sosegando
los latidos de mi corazón, tomé los zapatos, los puse delante
de papá, y fui sacando gozosamente todos los regalos con aire de reina
complacida. Papá reía, recobrado ya su buen humor,¡y Celina
creía estar soñando!... Felizmente, no era un sueño, sino
una dulce realidad: ¡ Teresita había vuelto a encontrar la fortaleza
de su alma, perdida a los cuatro años y medio (cuando
murió su madre) y habría de conservarla ya para
siempre!...
*
Aquella noche de luz comenzó el tercer período de mi vida, el
más hermoso de todos, el más lleno de gracias del cielo"...-
(Historia
de un alma- Ms. A-Cap. V).
