Fue
una buena película... "La Marca del Zorro". El niño
Bruce Wayne y sus padres la habían disfrutado, y ahora regresaban a
su Mansión, caminando, poco preocupados por su seguridad en una pacífica
noche de Gotham City. Esa exagerada confianza condujo a los Wayne a un encuentro
con la muerte cuando un ladron anónimo los asesinó para robar
sus joyas, ¡y el niño Bruce lo vió todo!
Años después, ya hecho un adulto y luego de recorrer el mundo
aprendiendo diversas formas de las artes marciales y de labores de detective,
Bruce decidió convertirse en el guardián de las ahora violentas
noches de Gotham. Y lo hizo adoptando la forma de aquello que lo espantó
de niño, una noche cuando todavía tenía a sus padres
con él y cayó en una de las muchas cuevas existentes bajo la
Mansión. ¡Sí!. Sería un murciélago...
En
sus primeras incursiones, Batman fue perseguido por la policia. El vigilantismo
era algo que no sería tolerado. Pero la llegada a la ciudad de felones
como El Joker, El Pingüino o las sensuales Poison Ivy y Gatúbela,
sumado a la corrupción cada vez más creciente en las esferas
políticas y de la misma policia de Gotham, hicieron que el comisionado
de policia James Gordon aceptara la ayuda de este demonio, al que invoca en
las frias noches, iluminándolas con su emblema...