Cierto día los chicos de sexto A decidieron juntarse para ir a jugar, comer e ir a contar chismes que se enteraban de los otros grados, pero lo que no sabían es adonde iban a ir. Un chico dijo vamos a la vieja cabaña de mi abuelo.

    Todos opinaron que era una genial idea. Mañana nos reunimos en la esquina de mi casa. La hora había llegado, todos los chicos estaban reunidos, lo que el chico no les había contado es que la cabaña quedaba en el "Pantano De La Muerte".

    Cuando llegaron era como un laboratorio, con tubos de ensayos llenos de líquidos de todos colores, habían cuchillos filosos y armas de fuego.

    Como si fueran un científico loco, los chicos empezaron a contar cuentos de terror. Cuando ya eran como las doce de la noche, empezaron a escuchar ruidos como si pisaran el techo, las ventanas se estrellaban y de repente una sombra oscura apareció en la puerta...

Autores: Sebastián Saitúa, Marcos Amieva, Cristian Baigorria, Sebastián Rodriguez y Luisina Clementi.

Referencia: El grupo trabajo en el aula en la construcción del Montruo. Se puede observar la imagen donde están trabajando con mucho empeño.

    Max, uno de los muchachos que se encontraba en la cabaña, dijo que iba a salir a ver qué ocurría; todos le aconsejaron que mejor nó, que podía ser peligroso, pero él no hizo caso y salió.

    Los demás muchachos que se habían quedado en la cabaña estaban muy preocupados por Max, quien había salido al "Pantano de la Muerte".     Max tropezó y, al levantarse, se dió cuenta que estaba rodeado de esqueletos.

    Cuando se paró, saltó rápidamente... los esqueletos lo rodeaban... al voltear se fijó que una sombra se acercaba a él... la vió tan, pero tan cerca, que por un momento pensó que la sombra había entrado en su cuerpo...

    Al regresar a la cabaña, Max se sintió muy extraño, cuando llegó a la cabaña sus amigos le preguntaron qué había visto pero él no dijo nada por un buen rato. Sus amigos comentaron que lo habían visto muy extraño...

Autores: Grupo 1 de Lima, Perú

Miss: Elsa Graciela Cortijo

    El chico quedó hipnotizado mirando aquella esfera luminosa, pequeña y misteriosa.

    Dentro de ella se escuchó una extraña voz que se dirigía a los esqueletos, dándoles una orden en un idioma desconocido en el mundo, y en ese instante todos los esqueletos fueron hundiéndose en la tierra.

    Max, asustado, corrió hacia la vieja cabaña.

    Llegando a ella, escuchó la misma voz que antes, con la diferencia, que esta era más potente y en nuestro idioma, diciéndole que no se acerque más al pantano porque la próxima vez sería peor el castigo. Esa luz desapreció en la neblina, mientras que Max volvió a la normalidad.

    Los chicos, que estaban mirando por la ventana, se quedaron muy impresionados por lo sucedido.

A la mañana siguiente, cada compañero llegó a su casa. Ellos acordaron no decirle nada a su familia pero que nunca volverían a ir a ese lugar.

Pasaron los años, y a Max no se le sacaba de la cabeza ese momento tan feo que vivió. A la noche no se podía dormir, porque soñaba con esa luz roja que se le apareció años atrás.

    Nunca nadie supo nada de lo que pasó, hasta que un día...

AUTORAS: Samanta, Micaela y Marianela.

    Hasta que un día otros chicos decidieron ir a la cabaña. La luz pensó que había sido Max.

    La luz apareció y los chicos se asustaron y salieron corriendo. Al otro día volvió Max. La luz lo castigo más fuerte. El castigo fue: ser rata por un día. La luz le advirtió esta es la última vez que lo perdonaba.

    Max muy asustado llamo a sus amigos pero nadie le creía. Max no sabía que hacer, entonces decidió volver al pantano. No encontró nada y se quedo un poco más tranquilo. A los 3 días volvió. La cabaña estaba toda sucia. Sintió unos ruidos raros, vio sombras, salió, y no encontró nada. Se fijó y era un sapo que estaba por allí.

    Volvió a la casa, tubo un sueño muy raro. Soñó que estaba en el pantano, que veía la luz, y esta lo llamaba. El estaba duro pero algo lo llegaba entonces .........

Echo en la Escuela Taller Nº65.

Autores: Ana Clara Aguzzi y Santiago Echazarreta

Te proponemos que escribas el capitulo final y lo envies por correo a: marisa@mixta.unsl.edu.ar